Un nuevo encuentro virtual del Foro de Seguridad Pública abordó cómo actuar en casos de violencia de género. El panel con especialistas en la materia contó con la participación de más de 200 vecinos de distintos barrios de la Ciudad.

El Foro de Seguridad Pública (FOSEP) tuvo un nuevo encuentro virtual con vecinos de distintos barrios de la Ciudad, donde el foco estuvo puesto en la violencia de género y en la manera en que se debe actuar si uno es víctima de este flagelo o conoce a alguien que lo padece.

El FOSEP es un espacio de comunicación entre vecinos de la Comuna con representantes gubernamentales y profesionales de distintas áreas para hallar soluciones a diferentes problemáticas y pregonar el bien común entre todos.

Bajo el disparador de ¿cómo actuar en casos de violencia de género?, estuvieron presentes para evacuar dudas tres mujeres que cumplen importantes funciones en asesoramiento y resguardo de víctimas en distintos organismos públicos de la Ciudad Carolina Barone, directora General de la Mujer del Gobierno de la Ciudad; Mariana Di Palma, directora General de Violencia de Género del Ministerio de Justicia y Seguridad; y Cintia Larregina, integrante del Equipo de Violencia de Género UF Este, del Ministerio Público Fiscal.

Las especialistas estuvieron conectadas desde el edificio del Centro de Monitoreo Urbano (CMU) de la Policía de la Ciudad y desde allí interactuaron con los vecinos.

“El objetivo de la jornada tiene que ver con interpretar y ver desde los hechos concretos cómo actuar en casos de Violencia de Género”, sostuvo Barone en el comienzo de la charla.

La exposición continuó exhibiendo en una diapositiva todos los mecanismos que existen para darle respuesta a la mujer ante un hecho de violencia de género, desde las diferentes líneas telefónicas y comisarías hasta centros de asistencia, hospitales y fiscalías.

“Todos los casos son diferentes, no hay sólo una respuesta, todas las mujeres requieren un abordaje especializado e integral”, remarcó Di Palma.

Se definió a la violencia de género como aquellas actitudes que dañan a una mujer por el solo hecho de ser mujer y se hizo hincapié en la transformación que generó en el tema la promulgación de la Ley 26.485, con la que se le dio un abordaje general y se la incluyó en la agenda de seguridad pública.

Se caracterizaron los tipos de violencia más conocidos (física, psicológica, simbólica, económica, sexual y política) y sus modalidades (doméstico, institucional, laboral, contra la libertad reproductiva, obstétrica y mediática).

“El femicidio es la forma más extrema contra las mujeres y la principal razón de muerte violenta en la Argentina. Dos de cada tres mujeres que son asesinadas, son asesinadas por ser mujeres. A los hombres se los asesina por cuestiones públicas, como robos, narcotráfico, crimen organizado”, continuó Barone.

Luego se pasó a explicar al “Círculo de la Violencia”, de cómo puede comenzar con una simple acción o humillación e ir incrementándose en forma de espiral para terminar en casos extremos como los femicidios.

Di Palma y Larregina comentaron la situación que puede ocurrir cuando a la mujer le toca irse del domicilio donde vivía con el agresor y le quedaron pertenencias en el interior.

“En estos casos se acompaña a la mujer con la fuerza pública por el peligro que puede tener. Se necesita también hacer un inventario de estos bienes para que el agresor no disponga de ellos y los tengamos identificados”, explicaron.

También resaltaron el papel que cumplen los hogares, con domicilios reservados, para darle resguardo a la mujer y contenerla hasta que la situación se normalice.

“En la ciudad de Buenos Aires existen cinco unidades convivenciales. Cada una responde a poblaciones y demandas diferentes de riesgo. Además de la hospitalidad, se las acompaña psicológicamente para que no sólo sea una estadía para dormir sino que puedan tener un proyecto de vida hacia la autonomía”, dijo Di Palma.

También hicieron mención cuando se manipulan armas de fuego en situaciones de violencia, por lo que resaltaron que es importante actuar antes de que sean utilizadas y poder ser incautadas por el personal policial.

En ese caso, se le prohíbe al agresor por una medida judicial la compra y tenencia de armas. Si es un efectivo policial, se le informa a la autoridad para que sólo utilice el arma en su trabajo y no en su hogar.

Hubo un apartado importante sobre las medidas que se toman cuando hay en el hogar niñas, niños y adolescentes. Aquí, se le puede otorgar una guarda a un familiar cercano para el cuidado de los hijos. Y todo debe informarse al Consejo de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes.

Una vez terminadas las exposiciones, se abrieron las preguntas y los vecinos de distintas edades pudieron evacuar sus dudas sobre el tema. Además, las especialistas pidieron que dejaran los mails los interesados para compartir información y responder más consultas sobre casos específicos.

Para finalizar el encuentro, se mostraron diapositivas sobre las formas de contacto para denunciar o buscar asesoramiento: El Centro de Justicia de la Mujer, ubicado en avenida Pedro de Mendoza 2689 o al 4011-3000; la Dirección General de Acompañamiento, Orientación y Protección a las Víctimas, del Ministerio Público Fiscal de la Nación, sito en Perón 667 o al 6089-9114/9135; las Unidades de Orientación y Denuncia, del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad al 0800-333-47225, o en www.fiscalías.gob.ar/en-linea/; y las líneas de asistencia: 911, 144 y 102 (Consejo de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes).