La Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), ordenó una inspección integral en un establecimiento que funcionaba como centro médico, en el barrio de Liniers, en el cual se detectaron numerosas irregularidades.

La Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), a cargo del Dr. Carlos Rolero Santurián, ordenó una inspección integral en un establecimiento que funcionaba como centro médico, en el barrio de Liniers, y se dispuso su clausura preventiva y el traslado de material de uso médico y patogénico para su destrucción.

El caso se inició a partir de una denuncia anónima por arrojo de residuos patogénicos en la vía pública. Consecuentemente, el fiscal Rolero Santurián ordenó la realización de la inspección en el establecimiento investigado, ubicado en la calle en la calle Ramón Falcón al 6900, el cual funcionaba como centro médico. Al momento de realizarse la inspección, se detectó otro establecimiento ubicado enfrente, también del rubro de prestaciones sanitarias, que se pudo corroborar que disponía ilegalmente de residuos patogénicos.

El procedimiento fue realizado por personal del Cuerpo de Investigaciones Judiciales, del Departamento Federal de Investigación de Delitos Ambientales de la Policía Federal Argentina, de la Dirección Nacional de Migraciones, de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT), de la Unidad Operativa de Fiscalización Integral y de las Direcciones de Fiscalización y Control y de Control Ambiental del GCBA.

En la inspección se encontraron productos de uso médico e insumos descartables, así como material de uso ginecológico –como espéculos vaginales, Dispositivos Intrauterinos (DIU), cepillos, agujas y jeringas vencidas-, todo lo cual se dispuso que sea trasladado para su destrucción.

Asimismo, se detectaron diversas irregularidades como tener solicitud de trámite no librado al uso y falta de sistema de autoprotección, de certificados de fumigación y de limpieza de tanque de agua. A su vez, el lugar no contaba con luces de emergencia ni carteles de salida. Tampoco presentaba planos de ventilación mecánica.

Ante tal situación, se procedió al labrado de las actas correspondientes a las falencias y faltas corroboradas, y se dispuso la clausura administrativa de manera preventiva del establecimiento y el secuestro de todos los materiales de uso médico y descartables para su destrucción.