Con las medidas de prevención necesarias, el Gobierno porteño retomó los trabajos en la obra de la Central Obelisco. La misma facilitará el acceso, la combinación entre las líneas y mejorará la seguridad en caso de emergencia.

El Gobierno de la Ciudad decidió seguir avanzando en las obras de la Central Obelisco, con las medidas de prevención necesarias frente al Covid-19, en tareas de excavación y hormigones.

La Central Obelisco es el espacio donde combinan las líneas B, C y D que históricamente fue uno de los puntos más congestionados de la red, donde transitaban unas 300 mil personas por día.

En este sentido, ya se finalizó la primera etapa del proyecto, parte de la segunda y resta una tercera. Al terminar, se minimizará la congestión de usuarios en los andenes, se facilitará el acceso y la combinación entre las líneas y se mejorará la seguridad en caso de emergencia.

Primera etapa (finalizada)

Consistió en la construcción de un túnel de hormigón armado con sus respectivos empalmes con el andén sentido a Catedral de la Línea D y el andén mano a Constitución de la Línea C. Las obras incluyeron los accesos por escalera fija y ascensor.

Segunda etapa (en obra)

Comprendió la construcción de un amplio acceso sobre la calle Sarmiento, entre Suipacha y Esmeralda, que conecta con la estación 9 de Julio en el andén sentido a Catedral de la Línea D. Además, contempla la instalación de dos ascensores: uno en la estación Diagonal Norte sentido a Retiro (inaugurado) y otro en 9 de Julio (andén norte, sentido a Catedral).

Tercera etapa (en obra)

En la última fase de las obras se ampliará el andén de la estación 9 de Julio y se construirá un pasillo paralelo para realizar el trasbordo entre líneas B y C. Además, expandirán ambos andenes de Diagonal Norte e incorporaremos un ascensor -que unirá la vereda y el andén sentido a Congreso de Tucumán de la Línea D-, salas auxiliares y de ventilación para el conjunto de estaciones.