Será declarada inconstitucional
08 Junio 2018
Desde el Colegio de Abogados manifestaron que “de aprobarse la ley que permite la interrupción voluntaria del embarazo, tendrá implicancias constitucionales, ya que la Constitución nacional determina la existencia de persona humana desde el momento mismo de la concepción”.
A través de un comunicado, el Colegio de Abogado, aseguró que "siendo inminente el tratamiento parlamentario de varios proyectos de ley que permiten la interrupción voluntaria del embarazo, este Colegio se ve en la necesidad de aclarar las implicancias constitucionales que tendrá la eventual aprobación de una ley en tal sentido".
"El derecho argentino, en disposiciones con jerarquía constitucional, determina la existencia de persona humana desde el momento mismo de la concepción", manifiesta el comunicado, firmado por el directorio de la Entidad.
En el mismo sostienen que "nadie puede desconocer, que el derecho argentino, en disposiciones con jerarquía constitucional, determina la existencia de persona humana desde el momento mismo de la concepción. La legislación vigente no deja duda al respecto. Así lo establece el artículo 1º de la Convención sobre Derechos del Niño, con la declaración interpretativa formulada por nuestro país al ratificar el tratado conforme la exigencia establecida en el artículo 2 de la ley 23.849, el cual dispone que: 'se entiende por niño todo ser humano desde el momento de su concepción y hasta los dieciocho años de edad'".
Y se agrega: "De allí que, a la persona humana, desde la concepción misma, le resulten aplicables la totalidad de las normas que, tanto en nuestro derecho interno como en los tratados internacionales sobre derechos humanos, protegen la vida. Debemos -en particular- recordar que tanto la Convención sobre los Derechos del Niño, como el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención Americana sobre Derechos Humanos poseen jerarquía constitucional conforme lo dispone el artículo 75, inciso 22 de nuestra Constitución. En línea con lo expuesto, el artículo 75, inc. 23 de la Constitución Nacional, impone al Congreso la obligación de legislar 'en protección del niño desde el embarazo'. Podrá distinguirse, entonces, entre personas ya nacidas y personas por nacer, pero ese dato biológico es irrelevante desde el punto de vista jurídico, pues conforme nuestro ordenamiento jurídico supremo, y también conforme lo dispone el nuevo Código Civil y Comercial en su artículo 19, ambas son personas humanas y, como tales, tienen derecho a la vida".
Quien hablo con algunos medios fue el abogado Guillermo Lipera, secretario de la entidad, quien aseguró: "La publicación del comunicado es estrictamente técnica y legal. Allí nos preguntamos: ¿cumplimos la Constitución nacional o no la cumplimos? Interrumpir el embarazo es violar la Constitución y también al bloque de tratados que demuestran que la vida comienza en la misma concepción".
Lipera manifestó "estar en contra" de la legalización del aborto "porque ya hay una persona en el vientre". El abogado hizo hincapié en que "la solución no está en el aborto sino en la prevención, contención y acompañamiento de las mujeres embarazadas. Y aquí las instituciones tienen también un rol fundamental que cumplir: dictar una nueva ley de adopción que facilite y agilice el trámite, educar en materia de salud reproductiva y accionar con ejemplaridad para prevenir abusos sexuales y castigar con todo el peso de la ley a los culpables de ese delito infame".
El texto concluyó diciendo que "esta breve reseña de las normas constitucionales y legales vigentes, no puede omitir un dato cronológico esencial para este análisis. Tanto los tratados internacionales arriba mencionados, como la propia Constitución Nacional y, más aún, el Código Civil y Comercial, son normas de última generación. No estamos haciendo referencia, por cierto, a antiguos y arcaicos textos legales originados en épocas pretéritas que, sin perjuicio de su vigencia formal, podrían contradecir las nuevas concepciones políticas y sociales. Por el contrario, los textos constitucionales y legales citados, son recientes y han sido incorporados en plena vigencia de nuestras instituciones democráticas. Más allá de la opinión personal de cada uno sobre el tema en debate, que tiene dividida a la opinión pública, y aprendiendo de los errores pasados de nuestra historia, debemos advertir la importancia de respetar los procedimientos legales necesarios para modificar las disposiciones de raíz constitucional, de modo de evitar precedentes que puedan ser utilizados en futuro para debilitar el sistema democrático y republicano fijado en nuestra Constitución".
Por su parte, Lipera ratificó que "el Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires no va a hacer más nada que esto. Si quieren aprobar el proyecto de ley, deberán modificar la Constitución; si no, la van a estar violando… A título personal, sé que si la ley se aprueba van a surgir muchos pedidos de inconstitucionalidad. Y yo voy a firmar cada pedido que me entreguen".