El jefe del bloque de diputados nacionales de la CC ARI, Maximiliano Ferraro, le reclamó al ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, que incorpore a representantes del Congreso en el “Consejo Asesor para la planificación del regreso presencial a las aulas” creado por Resolución N° 423/2020.

"Entiendo que el dictado de la resolución es facultad de la cartera ministerial y si bien comparto a su vez la pluralidad de voces y de disciplinas que participarán, resulta a mi consideración inadmisible haber omitido a la representación política del parlamento nacional, dada la complejidad y los dilemas que enfrentamos y enfrentaremos, de los cuales la educación no queda exenta", afirma en la nota Ferraro quien integra la Comisión de Educación, Ciencia y Tecnología en la cámara baja.

En la misiva, el diputado de la CC ARI expresa además que "la participación de la pluralidad de voces con representación parlamentaria, junto con las otras que ya ha convocado, las considero de vital importancia para  evaluar y acordar las diversas estrategias posibles para el pronto regreso a las clases presenciales" y recordó que "los grandes debates de la educación en nuestro país contaron con la participación previa y activa de los partidos políticos democráticos".

"A raíz de haber tomado conocimiento de la Resolución N° 423/2020 aprobada por el Ministerio a su cargo por la cual se crea el `Consejo Asesor para la planificación presencial a las aulas` a partir de su publicación en el Boletín Oficial en el día de la fecha, he tomado la decisión de escribirle la presente misiva a fin de plantearle mi inconformidad con la composición de la misma al no incorporar representantes del Honorable Congreso de la Nación", manifestó.

"Creo oportuno que Ud. pueda reconsiderar lo resuelto a través de la norma mencionada teniendo en cuenta el contexto histórico, social y político como dimensión atendible para pensar y ejecutar las diversas políticas en materia educativa", plantea en la nota.

Asimismo, Ferraro advirtió que "los sistemas de representación funcional donde cada grupo defiende sus propios intereses, finalmente terminan siendo una fachada para que el líder imponga su opinión parcial como hipotética expresión de todos".

"Por ello, estimamos que en pos de la defensa del verdadero interés general, el debate propuesto no puede carecer del aporte de quienes ostentamos la representación política que ordena nuestra Constitución", finalizó.