El servicio de la línea B del subte no funcionaría durante todo el jueves, a raíz de un paro de actividades que tiene pensado disponer el sindicato Asociación Gremial de los Trabajadores de Subte y Premetro (AGTSyP).

El metrodelegado Claudio Dellecarbonara explicó que la medida de fuerza se decidió debido a que la empresa Metrovías está a punto de despedir a “un trabajador que tiene un hijo discapacitado”.

Al finalizar la jornada del miércoles, el metrodelegado ratificó al portal Infobae que “con esta actitud, los trenes de la línea B no van a arrancar” a las 5:30 hs., de la mañana del jueves ya que “hasta ahora no hay ninguna respuesta positiva” por parte de Metrovías.

En este contexto, todo indica que la huelga regirá desde las 0 hs., de este jueves en la línea que une el bajo porteño con Villa Urquiza, pasando por otros barrios porteños como Chacarita, Villa Crespo, Almagro y Once, y el gremialista advirtió que la medida de fuerza se mantendría “hasta que se revierta la situación del compañero”.

Sobre los motivos del paro, Dellacarbonara sostuvo que Metrovías cometió una “escandalosa discriminación” al comunicar la intención de despedir a “un trabajador que tiene un hijo discapacitado”.

Por otra parte, denunció que la empresa “está llevando adelante una campaña de amedrentamiento, persecución antisindical, presiones a trabajadores para que renuncien, y decenas y decenas de sanciones arbitrarias”.

“Está claro que la empresa quiere buscar un conflicto, y por eso la hacemos responsable, al igual que al Gobierno de la Ciudad, por los inconvenientes que se generen a los pasajeros. De nuestra parte no podemos permitir un nuevo ataque ni que Metrovías le saque el pan a un trabajador que tiene que mantener a su hijo discapacitado”, finalizó.

El paro perjudicará a miles de usuarios que utilizan la línea B para ir a trabajar. Los metrodelegados no descartan que se llegue a un acuerdo con la empresa antes de la medianoche y se cambie la decisión con respecto a la medida de fuerza.

"Más de 20 sanciones por ausencias injustificadas"

Desde Metrovías contestaron que el conflicto se originó “por un empleado suspendido que en los últimos tres años acumula más de 20 sanciones por ausencias injustificadas”.

Además, la empresa aclaró que el empleado “no se encuentra despedido, sino que cuando se le comunicó hace unos días la suspensión de una semana, agredió verbalmente y amenazó a su superior”.

Puntualmente sobre su situación familiar, Metrovías agregó que “se le había dado de manera excepcional un permiso para ausentarse durante varios días. Se tomó más de los acordados sin avisar, cuando volvió se lo sancionó y al día siguiente volvió a faltar”.