El jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta participó de una reunión de vecinos en Vicente López junto a Jorge Macri pero el Intendente debió retirarse antes. Los planteos eran básicamente municipales con lo cual, pese a las buenas intenciones de Larreta, varias preguntas quedaron sin responder.

Como parte del trabajo conjunto entre la Ciudad y los municipios aledaños y del mismo signo político, se llevó a cabo este viernes una reunión de vecinos. La misma tuvo lugar en el Centro de Adultos Mayores del municipio de Vicente López y la invitación se realizó con la consigna de hablar, básicamente del Metrobus y de la seguridad, con el intendente Jorge Macri y el jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta.

La convocatoria era para las 8:15 hs con un desayuno. El primero en llegar fue el ex diputado y actual funcionario del Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, Juan Pablo Arenaza, quien coordina las reuniones con vecinos que realiza Larreta.

Jorge Macri arribó al lugar media hora después, visiblemente apurado. Ni bien entró al salón hubo unos tímidos aplausos y un par de gritos criticando el retraso del Intendente, algo que intentó explicar  alzando un poco de más la voz. Consciente de que no era la mejor manera de empezar Arenaza intervino y calmó un poco el ánimo de algunos pocos vecinos descontentos.

Con numerosas reuniones en su haber, el ex diputado hizo gala de toda su experiencia (incluso mencionó, a modo de chiste, que estaba más perdido que Santiago del Moro) y explicó que Jorge Macri se demoró por un problema personal y como Larreta iba a tardar un poco en llegar, decidieron comenzar igual.

Más calmo, Macri contó que falleció una prima (Teresa Calcaterra) y que debido a eso además iba a tener que retirarse antes para poder participar del entierro junto con su hijo, quien también estaba presente.

Por supuesto la mayoría de los planteos que se hicieron fueron de orden municipal, tal es así que si bien hubo referencias al Metrobus, muchos temas pasaron por la gestión en Vicente López.

Si bien queda claro que no tiene el aceitado el ejercicio de participar en este tipo de encuentros, Macri fue respondiendo muy amablemente, incluso cuando una vecina ya conocida para él gritaba y se quejaba todo el tiempo, haciendo enojar a todos dado que interrumpía constantemente. Tal es así que varias veces Arenaza le pidió respeto para el resto de los vecinos que querían escuchar las preguntas y las respuestas de Macri.

Al poco tiempo de haber comenzado llegó Larreta. Pidió disculpas por la demora y comentó que debió separar de la fuerza a un policía de la Ciudad, involucrado con las narcovalijas en la Embajada Rusa.

Canchero al interactuar con vecinos, el Jefe de Gobierno defendió el Metrobus, explicó los motivos de la no extensión del subte o la construcción de nuevas líneas, dio detalles de las acciones que se van coordinando con los municipios del Área Metropolitana para mejorar la seguridad y recepcionó inquietudes puntuales sobre algunas problemáticas que fueron planteando.

Faltando media hora para la finalización del evento, Macri se retiró en medio de una avalancha de vecinos que querían entregarle cartas, notas y propuestas. Larreta quedó encabezando la reunión y continuaron las preguntas.

Si bien hubo varios reconocimientos a la gestión del Indente, el 90% de las consultas o quejas pasaban por lo municipal pero el Jefe de Gobierno intentó una y otra vez dejar conformes a los vecinos que hablaban. Obviamente, pese a las buenas intenciones, los reclamos por mayor seguridad (que fueron muchos) o los problemas de estacionamiento, señalamiento en las calles, falta de iluminación, entre otras cosas, sólo pudieron ser expresados ante funcionarios del equipo de Macri que estaban presentes.

A las 10 hs terminó la reunión y se oyeron algunas quejas por lo breve de la misma. Queda claro que este tipo de encuentros, que son habituales en la Ciudad, debieran hacerse más seguido, al menos en Vicente López.