Ni Macri es profeta en su tierra
25 Septiembre 2018
Mientras los sindicalistas llevan adelante un nuevo paro nacional, que genera un gasto al país de aproximadamente 31.600 millones de pesos, el presidente Mauricio Macri fue premiado en Estados Unidos como "Ciudadano Global 2018".
El presidente de la Nación Mauricio Macri fue distinfuido, este lunes por la noche durante la ceremonia organizada por el Atlantic Council, como "Ciudadano Global 2018" por su labor al servicio de la cooperación internacional. El Jefe del Estado recibió el premio de manos de la abogada y líder empresarial Adrienne Arsht.
Mauricio Macri compartió la cena de gala junto con Chistine Lagarde, la primera dama argentina, Juliana Awada, y Luis Moreno, presidente del BID, entre otros.
Macri brindó un breve discurso en inglés cargado de optimismo sobre el proceso político y volvió a invitar a los estadounideses y a la comunidad internacional a invertir en el país. Repitió varios de los argumentos que les transmitió a los inversores con los que se reunió en las últimas horas, a solas.
Antes del discurso del mandatario argentino, se mostraron fotos del Mandatario y Arsht hizo una introducción sobre Macri: arrancó diciendo que tiene un "enamoramiento" con el Presidente, recordó su pasado como Presidente de Boca e incluso llegó a lamentar el resultado del clásico contra River.
"No se escape con mi premio", rompió el hielo el Presidente. Y bromeó: "Olvidó mencionar que soy un gran bailarín. Por favor no lo olvide la próxima vez". A su vez, dijo: "Empecé una gran relación también con Chistine hace algunos meses y ahora espero que a todos les pase lo mismo".
El Presidente en su discursó aseveró: “Estoy agradecido, lo tomé como reconocimiento para todo el pueblo argentino, por el valor que hemos mostrado para detener el proceso de convertirse en otra Venezuela. Los argentinos decidieron cambiar”, además Macri fue el encargado de cerrar el evento en el que también fueron premiados la primer ministro de Noruega, Erna Soldberg y Hamdi Ulukuya, fundador del Tent Partnership para refugiados.
La comitiva argentina, que llegó temprano, se ubicó a solo una mesa de distancia de Lagarde. Estuvieron el ministro de Hacienda Nicolás Dujovne y su esposa; el canciller Jorge Faurie; el vocero presidencial Iván Pavlovksy; el secretario de Asuntos Estratégicos Fulvio Pompeo, el jefe de la misión argentina ante la ONU Martín García Moritán, el senador Esteban Bullrich y el empresario Martín Eurnekian.
El Jefe del Estado agradeció la distinción y señaló que la considera "un reconocimiento al pueblo argentino por el coraje que hemos demostrado" en este tiempo para poner freno al proceso que amenazaba con convertir al país "en otra Venezuela".
"La Argentina decidió cambiar. Cambiamos porque entendimos que no podíamos dejar que el populismo afectara profundamente a nuestra sociedad", afirmó Macri durante la ceremonia realizada en el centro de eventos Cipriani Wall Street.
Durante la cena de gala el Presidente, junto a la primera dama, Juliana Awada, compartió la mesa con la directora ejecutiva del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde.
Macri sostuvo que a los argentinos "nos llevó más de 50 años aprender de nuestros errores, aprender que teníamos que creer nuevamente en la cultura del trabajo, en nuestro esfuerzo personal, en nuestra capacidad de mejorar nosotros mismos y, al mismo tiempo, ser una parte del mundo".
"Desde el comienzo de mi Gobierno hemos apostado a una integración estratégica y a mantener relaciones maduras con el mundo", subrayó.
Macri remarcó que la Argentina es un país "único en términos de oportunidades" y puso de relieve que ahora "estamos llevando adelante nuestra tarea para resolver problemas estructurales de los últimos 15 años, tales como el déficit fiscal, la falta de reglas claras y la falta de independencia del sistema judicial".
Apuntó que "estamos trabajando en todos estos temas y luchando especialmente contra la corrupción".
El Presidente señaló que precisamente ese cambio de escenario es el que hoy permite que existan condiciones favorables para invertir en múltiples sectores, como las energías renovables y no convencionales, la minería, la producción de alimentos y el turismo.
Destacó finalmente que "este año la Argentina tiene el honor de ser el anfitrión del G20" y dijo que "estamos orgullosos de mostrar nuestro compromiso con la cooperación internacional, con el multilateralismo y la gobernanza global".
"Estamos liderando el G20 poniendo las necesidades de la gente primero, buscando construir a partir de nuestras preocupaciones compartidas y de nuestros intereses comunes", indicó.
El premio "Ciudadano Global" fue conferido este año al presidente Macri, a la primera ministra de Noruega, Erna Solberg, y al emprendedor turco Hamdi Ulukaya, fundador de una ong que brinda ayuda a refugiados que debieron huir de sus países por situaciones de violencia política.
En ediciones anteriores recibieron esta condecoración el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau (2017); el primer ministro de Japón, Shinzo Abe (2016) y el ex presidente del Consejo de Ministros de Italia, Matteo Renzi (2016), entre otros líderes.
Uno de los momentos más emotivos de la velada fue el homenaje al difunto senador republicano John McCain, un furibundo crítico del presidente estadounidense Donald Trump. Los cerca de 500 comensales aplaudieron de pie. Había, entre otros, ministros australianos, de Hungría y Costa Rica.